Todas las mujeres alguna vez nos hemos asustado al hablar o al oír hablar del "cáncer de mama".
Pero a pesar de que la enfermedad es curable, sobretodo si se atrapa a tiempo, y son pocos los tipos de cánceres de mama que no tienen solución, también es importante analizar las posibles causas del incremento de esta enfermedad comparándonos con épocas pasadas.
Visitando la red, hemos encontrado un artículo muy interesante que hemos querido transcribir y que os pasamos el link para aquel o aquella que quiera profundizar.
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CANCER DE MAMA Y MEDICINA SISTEMICA:
Un estudio clínico demostró que la Medicina Sistémica, en combinación con el tratamiento convencional, potenció los efectos beneficiosos y minimizó los efectos indeseables atribuibles a la quimio y radioterapia.
El cáncer de mama consiste en la transformación de células benignas en células malignas que crecen en forma autónoma y desordenada en el tejido mamario.
El cáncer de mama constituye una de las neoplasias más frecuentes en el mundo, se estima que una de cada ocho mujeres será diagnosticada con esta enfermedad.
Entre los principales factores de riesgo se encuentran la edad y el género, más del 80% de todos los casos ocurre en mujeres de más de 45 años y menos del 1% ocurre en hombres.
Las mujeres que inician tempranamente sus períodos menstruales, antes de los 11 años, o llegan a la menopausia después de los 55, tienen un riesgo mayor, igual sucede con aquellas que no tuvieron hijos o los tuvieron después de los 30 años de edad.
Otros factores de riesgo son: el uso de anticonceptivos orales, la administración prolongada de terapia de reemplazo hormonal, la o besidad, el consumo exagerado de alcohol, la exposición a sustancias químicas similares a estrógenos (que se encuentran en pesticidas y ciertos productos industriales), exposición a la radiación, la presencia de genes predisponentes, antecedentes de tumores previos en mamas, útero, ovarios o colon, y antecedentes de cáncer en la familia.
Cuando se diagnóstica esta enfermedad, puede que no haya síntomas.
Pero mientras va creciendo, puede causar los siguientes cambios: un bulto o engrosamiento cerca de la mama o en el área por debajo del brazo o en el cuello; cambio en el tamaño o forma de la mama; secreción o molestias del pezón, crestas en la piel del seno, como la piel de una naranja; cambios en la forma o sensibilidad de la piel del seno, aureola o pezón como, por ejemplo, aumento de la temperatura, enrojecimiento e inflamación.
Una vez diagnosticado y clasificado el tumor, se plantea el tratamiento a seguir, el cual puede ser:
El tratamiento conservador que consiste en extirpar el tumor y margen de tejido mamario sano de seguridad.
Ante una técnica conservadora debe realizarse posteriormente radioterapia.
El tratamiento radical consiste en la extirpación de todo el tejido mamario, incluidos areola y pezón.
Tanto en el tratamiento conservador como en el radical se procede además a la eliminación de los ganglios linfáticos axilares.
En los casos de diseminación linfática se utiliza la hormonoterapia y la quimioterapia, tratamientos que pueden producir efectos colaterales de importancia.
(Y ahora dice lo que a mi más me ha gustado del artículo)
A pesar de los planes masificados de pesquisa y vigilancia para el cáncer de mama (auto examen, evaluación médica, mamografía, etc.) y a pesar de los tratamientos innovadores y cada más agresivos para la enfermedad, no se ha logrado disminuir significativamente la morbi-mortalidad.
El mundo científico no ha logrado establecer estrategias terapéuticas definitivas, que den como resultado la curación, sin embargo, todo apunta a que si logramos terapias que incrementen la competencia inmunológica del huésped, éste tendrá la mayor de las posibilidades de vencer al tumor y obtener una remisión de la neoplasia.
Si a esto añadimos terapias que actúen de forma antitumoral selectiva y que actúen contra los posibles agentes causales, estaremos muy cerca de tener el "tratamiento idóneo" que durante tantos años se ha buscado exhaustivamente sin obtenerse todavía la respuesta.
Dra. Francis Amendola
Directora del Dpto de Investigación de CMA
Esperamos que este artículo haya sido de vuestro interés.
Pero a pesar de que la enfermedad es curable, sobretodo si se atrapa a tiempo, y son pocos los tipos de cánceres de mama que no tienen solución, también es importante analizar las posibles causas del incremento de esta enfermedad comparándonos con épocas pasadas.
Visitando la red, hemos encontrado un artículo muy interesante que hemos querido transcribir y que os pasamos el link para aquel o aquella que quiera profundizar.
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CANCER DE MAMA Y MEDICINA SISTEMICA:
Un estudio clínico demostró que la Medicina Sistémica, en combinación con el tratamiento convencional, potenció los efectos beneficiosos y minimizó los efectos indeseables atribuibles a la quimio y radioterapia.
El cáncer de mama consiste en la transformación de células benignas en células malignas que crecen en forma autónoma y desordenada en el tejido mamario.
El cáncer de mama constituye una de las neoplasias más frecuentes en el mundo, se estima que una de cada ocho mujeres será diagnosticada con esta enfermedad.
Entre los principales factores de riesgo se encuentran la edad y el género, más del 80% de todos los casos ocurre en mujeres de más de 45 años y menos del 1% ocurre en hombres.
Las mujeres que inician tempranamente sus períodos menstruales, antes de los 11 años, o llegan a la menopausia después de los 55, tienen un riesgo mayor, igual sucede con aquellas que no tuvieron hijos o los tuvieron después de los 30 años de edad.
Otros factores de riesgo son: el uso de anticonceptivos orales, la administración prolongada de terapia de reemplazo hormonal, la o besidad, el consumo exagerado de alcohol, la exposición a sustancias químicas similares a estrógenos (que se encuentran en pesticidas y ciertos productos industriales), exposición a la radiación, la presencia de genes predisponentes, antecedentes de tumores previos en mamas, útero, ovarios o colon, y antecedentes de cáncer en la familia.
Cuando se diagnóstica esta enfermedad, puede que no haya síntomas.
Pero mientras va creciendo, puede causar los siguientes cambios: un bulto o engrosamiento cerca de la mama o en el área por debajo del brazo o en el cuello; cambio en el tamaño o forma de la mama; secreción o molestias del pezón, crestas en la piel del seno, como la piel de una naranja; cambios en la forma o sensibilidad de la piel del seno, aureola o pezón como, por ejemplo, aumento de la temperatura, enrojecimiento e inflamación.
Una vez diagnosticado y clasificado el tumor, se plantea el tratamiento a seguir, el cual puede ser:
El tratamiento conservador que consiste en extirpar el tumor y margen de tejido mamario sano de seguridad.
Ante una técnica conservadora debe realizarse posteriormente radioterapia.
El tratamiento radical consiste en la extirpación de todo el tejido mamario, incluidos areola y pezón.
Tanto en el tratamiento conservador como en el radical se procede además a la eliminación de los ganglios linfáticos axilares.
En los casos de diseminación linfática se utiliza la hormonoterapia y la quimioterapia, tratamientos que pueden producir efectos colaterales de importancia.
(Y ahora dice lo que a mi más me ha gustado del artículo)
A pesar de los planes masificados de pesquisa y vigilancia para el cáncer de mama (auto examen, evaluación médica, mamografía, etc.) y a pesar de los tratamientos innovadores y cada más agresivos para la enfermedad, no se ha logrado disminuir significativamente la morbi-mortalidad.
El mundo científico no ha logrado establecer estrategias terapéuticas definitivas, que den como resultado la curación, sin embargo, todo apunta a que si logramos terapias que incrementen la competencia inmunológica del huésped, éste tendrá la mayor de las posibilidades de vencer al tumor y obtener una remisión de la neoplasia.
Si a esto añadimos terapias que actúen de forma antitumoral selectiva y que actúen contra los posibles agentes causales, estaremos muy cerca de tener el "tratamiento idóneo" que durante tantos años se ha buscado exhaustivamente sin obtenerse todavía la respuesta.
Dra. Francis Amendola
Directora del Dpto de Investigación de CMA
Esperamos que este artículo haya sido de vuestro interés.
Salud-os, Adela Carrasco
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Visitanos en http://www.lacoctelera.com/reflexologiaparati
Te hablamos de salud...
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